Si por desconocimiento, miedo o pereza, aún no te atreves a utilizar el modo manual de la cámara de tu dron, en este post te voy a contar las ventajas del modo manual frente al automático.
1- Decide exactamente la luz que quieres.
En el modo automático será el dron quien decida la cantidad de luz que va a tener la foto. La mayoría de las veces, sobre todo si hay mucho contraste en el encuadre, la fotografía no quedará correctamente expuesta.
En el modo automático es muy probable que alguna zona quede subexpuesta o completamente quemada, cosa que de manera manual nunca te ocurrirá, porque puedes exponer la zona que decidas.
2- Mejora la calidad de tus fotos seleccionando el ISO correcto.
En situaciones de poca luz la cámara automáticamente sube el ISO, con la consiguiente pérdida de calidad.
Si estás haciendo la foto en el modo manual, podrás bajar el ISO para obtener más calidad y compensar la pérdida de luz con el tiempo de exposición o la apertura.
3- Evita las fotos movidas.
Otro de los problemas del automático es que cuando hay poca luz, los tiempos de exposición son más largos, lo que nos puede dar como resultado fotos completamente movidas que no nos sirven para nada. Con el modo manual podemos evitarlo en la primera foto si sabemos cómo hacerlo. Es tremendamente sencillo.
4- Modo manual = a modo creativo.
Con el modo manual podemos jugar con los tiempos de exposición a nuestro antojo, produciendo sensaciones de movimiento o congelado según nos interese.
Seguro que recuerdas alguna foto de una catarata con un efecto sedoso en el agua, o una moto de motocross saltando y congelada en el aire. Esas son algunas de las cosas que podemos conseguir controlando el tiempo de exposición de la cámara de nuestro dron.
5- Decide la apariencia fría o cálida en tus fotos.
Si sabes qué es la temperatura de color y el balance de blancos, en el modo manual podrás decidir si la foto va a tener unos tonos más fríos o más cálidos, produciendo así sensaciones muy diferentes. Tu dron buscará los colores más neutros en el modo automático, pero a veces puede no interesarte. Por ejemplo, se te puede ocurrir potenciar los colores cálidos de atardecer y conseguir así una puesta de sol espectacular, o dar un aspecto mucho más frío a un paisaje nevado.
6- Enfoca dónde y como quieras.
En automático la cámara de tu dron decidirá dónde quiere enfocar y si la zona enfocada será mayor o menor. En cambio en manual, podrás decidir exactamente qué es lo que quieres enfocar en un encuadre. Además, si sabes qué es la profundidad de campo y cómo controlarla, podrás conseguir fondos desenfocados o tener todo un paisaje enfocado.
Como puedes comprobar, se trata básicamente de tomar decisiones conscientes frente a las que tomaría la cámara automáticamente.
Muchas de esas veces la cámara de nuestro dron no toma las decisiones que a nosotros nos gustaría. Por tanto es una cuestión de tomar el control. Puedes tener el mejor dron del mercado, pero si disparas en modo automático, estarás desperdiciando todo su potencial.
Todas estas decisiones podrás tomarlas y aplicarlas en cada fotografía. Recuerda que en el modo manual, por muy avanzada que sea la cámara de tu dron, siempre irás por delante de ella en el modo automático.
Tomar la decisión correcta en cada momento en el modo manual es lo que va a diferenciar una buena foto de una foto mediocre.
Si algo de lo que has leído te suena a chino, te recomiendo que comiences por el curso de iniciación a la fotografía con drones. En este curso aprenderás todo lo que te he contado en este post de manera muy práctica y dominarás el modo manual, sacando todo el partido a las fotos hechas con tu dron.
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